viernes, 20 de enero de 2012

Munch

Ésta es una de mis obras de arte favoritas, no creo que sea necesario explicar el porqué, a simple vista destacan su belleza e intensidad. La profundidad que adquiere la figura, es una suerte de entrega al público que la observa. El halo de misterio que la rodea parece sumirla en una constante luz lunar, que evoca la conexión natural entre la vida y la muerte.


La figura desnuda aparece como suspendida en el aire, impresión que solo en parte se debe a las líneas trazadas con un pincel grueso y de apariencia fluvial, que circundan la figura. La Madonna de Munch (también llamada Mujer enamorada) oscila entre la indecisión del sueño y la vigilia, la monumentalización del cuerpo desnudo hace que parezca salir al encuentro del espectador.

"La pausa en la que se detiene el curso del mundo.
Tu rostro contiene toda la belleza de la tierra,
tus labios carmesí,
como un fruto que madura,
se entreabren como con dolor,
la sonrisa de un cadáver,
ahora la vida le tiende la mano a la muerte,
se forja la cadena que une las mil generaciones
de muertos a las mil generaciones venideras"
Edvard Munch (1863-1944)

1 comentario:

  1. Un desnudo femenino muy sensual y de gran contenido emocional. Espectacular.

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